Gernika plantea 62 acciones para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero y el consumo de energía

10/03/2023

En su apuesta por alcanzar la neutralidad climática, Gernika ha puesto en marcha una hoja de ruta con 62 acciones, que incorpora estrategias específicas encaminadas al ahorro a través de la aplicación de iniciativas de eficiencia energética, la implantación de energías renovables y el aumento de su resiliencia al cambio climático.

Se trata del Plan Integrado de Mitigación y Adaptación al Cambio Climático (PIMACC) que será la hoja de ruta que utilizará el Ayuntamiento de Gernika-Lumo para alinearse con los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero establecidos a nivel internacional y autonómico, y que está alineado con el proyecto LIFE IP Urban Klima 2050.

Como paso previo a la elaboración del Plan de Acción, en 2022, se desarrolló el documento diagnóstico que describía la situación de partida del municipio de Gernika-Lumo en tres ámbitos:

Además, para la elaboración del plan se ha realizado un proceso de participación pública con el objetivo principal de impulsar la participación de la ciudadanía, el intercambio de ideas y recoger aportaciones de diferentes asociaciones, entidades y agentes interesados. El documento continúa abierto a la participación ciudadana hasta el próximo 19 de marzo en la web del ayuntamiento.

El plan propone 5 metas:

  1. Reducir, para el año 2030, al menos un 55% las emisiones de GEI del municipio respecto al año de referencia.
  2. Asegurar que al menos el 32% de la energía (eléctrica y térmica) consumida por los edificios municipales sea autoproducida mediante origen renovable.
  3. Reducir los consumos energéticos de la administración pública en al menos un 35%.
  4. Garantizar que el 40% de los edificios municipales tengan una calificación energética B.
  5. Reducir los riesgos derivados del cambio climático y asegurar la resiliencia del municipio y de su población.

Para alcanzar estas metas el plan propone un total de 62 acciones estructuradas en 16 programas que a su vez derivan de 7 líneas estratégicas.

  1. Administración pública ejemplar: incluye acciones de mejora de sistemas de iluminación de edificios municipales y del alumbrado público, o la apuesta por un transporte urbano colectivo 100% eléctrico.
  2. Transición hacia un modelo energético justo y sostenible: entre las acciones destacan la introducción de criterios de eficiencia energética en los nuevos desarrollos urbanos, el impulso a la rehabilitación energética de edificios privados, o el fomento de comunidades energéticas locales.
  3. Fomento de la movilidad sostenible y cero emisiones: esta línea incluye acciones como la redacción del Plan de Movilidad Sostenible, o la apertura de nuevas vías ciclistas y peatonalización de espacios urbanos.
  4. Reducción de la generación de residuos y la optimización de su gestión a través de su reciclaje. 
  5. Optimización del ciclo integral del agua: se implantarán programas para garantizar la eficiencia de la gestión y de los usos del agua y se implementarán soluciones para reducir el riesgo de inundaciones.
  6. Conservación del medio natural urbano y promoción de una trama urbana resiliente: se integrarán criterios de mitigación y adaptación al cambio climático en la revisión del planeamiento urbanístico y normativa de edificación, se impulsará la restauración de ecosistemas degradados y protección de especies autóctonas vulnerables al cambio climático, entre otras acciones.
  7. Resiliencia y sensibilización en materia de cambio climático y hábitos de consumo responsable: se actualizará el plan de emergencias municipal incluyendo los riesgos climáticos e Implantación de sistemas de aviso frente a amenazas climáticas, y se desarrollarán programas de concienciación en materia de mitigación y adaptación al cambio climático en distintas áreas.